jueves, 22 de enero de 2009

IMPACTO AMBIENTAL DE LOS EDIFICIOS

IMPACTO AMBIENTAL DE LOS EDIFICIOS
Los edificios tienen un impacto ambiental enorme sobre la existencia humana. Vivimos en ellos, nos ganamos la vida en ellos, participamos en actividades recreativas en ellos, recibimos asistencia médica en ellos; y durante nuestra vida —de una u otra forma—, pasamos en ellos el 90 por ciento de nuestro tiempo.

Pero los edificios también tienen un impacto significativo sobre el planeta. Con más de 116 millones de edificios residenciales, 4.7 millones de edificios de oficinas y 117.000 construcciones educativas (por nombrar sólo algunas), no es de extrañar que su existencia deje una marca en el medio ambiente. Para tener una idea comparativa de los efectos que los edificios tienen sobre nuestro planeta, basta fijarse en estas estadísticas sobre edificios realizadas por la Agencia de Protección Ambiental (EPA, Environmental Protection Agency):

• En total, los edificios consumen alrededor del 40 por ciento de toda la energía, constituyendo los edificios residenciales el 54.6 por ciento y los edificios comerciales el 45.4 por ciento de ese total.
• En promedio, los edificios de los EE.UU. emiten cerca del 40 por ciento de las emanaciones de gas que provocan el efecto invernadero, lo que significa más dióxido de carbono que el correspondiente al sector de transporte y al sector industrial, independientemente.
• Más del 12 por ciento de toda el agua consumida en EE.UU. es utilizada por ocupantes de edificios; el 25.6 por ciento de ese total está comprendido por ocupantes de edificios comerciales y el 74.4 por ciento comprendido por ocupantes residenciales.
• La impermeabilidad de los edificios y la infraestructura que los apoya contribuye a la escorrentía que contamina ríos, lagos y estuarios.
• Los contaminantes del aire —que surgen de la quema de combustibles, materiales de construcción y mobiliario, productos de mantenimiento y de limpieza, sistemas de calefacción y refrigeración y otros—, son entre dos y cinco veces más concentrados en los ambientes interiores que en el exterior. Por lo tanto, el aire que se encuentra en el interior de los edificios, es a menudo más tóxico para los seres humanos que el aire exterior.
• Cerca del 60 por ciento de los residuos no industriales está compuesto por desechos relacionados con la construcción y la demolición, que alcanzan la cantidad de 136 millones de toneladas anuales. El 48 por ciento de estos desechos provienen de residuos de demolición, el 44 por ciento de obras de renovación y el 8 por ciento de construcciones nuevas.

La construcción y el mantenimiento de los edificios que cuentan con un desempeño pobre en términos de consumo de agua y energía, en requisitos de mantenimiento y productividad y en salud de sus ocupantes; no sólo resultan en un costo de funcionamiento más elevado, sino que perpetúan una cultura de desperdicio de oportunidades. El desarrollo de espacios verdes no tiene por qué costar más y los beneficios —tanto palpables como ocultos—, son enormes. Tanto si usted es un inversor, una compañía de gestión o un propietario de un bien inmueble comercial, residencial o industrial; puede lograr una considerable recuperación económica mediante la construcción verde (o construcción ecológica).

No hay comentarios:

Publicar un comentario